Desde marzo no cogía una cámara de fotos. Más de tres meses. Nunca había estado tanto tiempo sin hacer fotos desde que empecé con la fotografía hace más de 10 años. Pero ando desbordado: trabajo, familia y cambio de vivienda no son compatibles con muchas otras cosas. Y toca priorizar. Espero que en unos meses las cosas cambien.
Pero hoy rompí la sequía fotográfica: entre las ganas que le tenía a la Nikon y que era un día especial, en el que Sílvia cumplía 3 años, he llenado la tarjeta de retratos infantiles, y éste ha sido el elegido entre todos. ¿Qué os parece? Tres años ya… Suena a tópico, pero qué rápido pasa el tiempo. Demasiado. Por mucho que nos estresen las obligaciones, ¡no nos olvidemos de disfrutar!
Nikon D700 | 70-200mm f/2.8 | 200mm | 1/640s | f/4 | ISO 400