Como cada año por estas fechas, llega una de las citas ineludibles de mi calendario, el Rally Catalunya. No es ni de lejos el mejor rally del WRC, dicen incluso que es de los peores, pero es el que tenemos, y como la mayoría no podemos hacer nada al respecto, mejor adaptarse e intentar disfrutarlo, ¿no creéis?
Y para este año la organización del RACC nos había preparado una prueba bien variada: tramos nocturnos el viernes, lo que para los que hacemos fotos es un reto importante, día de asfalto el sábado y finalmente jornada en tierra el domingo, mi parte preferida.
En la foto, monsieur Sébastien Ogier, campeón del mundo de 2013 desde el pasado Rally de Francia-Alsacia, y que también ha ganado la prueba catalana. Loeb ya no está, después de dominar con mano de hierro 9 temporadas seguidas, pero como dicen, a rey muerto rey puesto, y ese rey vuelve a ser francés. Ogier ha dominado totalmente la temporada formando con su copiloto Julien Ingrassia y Volkswagen una combinación insuperable, y que parece augurar el inicio de otra etapa de dominio francés. Veremos cómo se presenta la temporada que viene.